The Noises presenta su nuevo single «Nubes de Metal», la última de las historias que la agrupación nos ha ido desvelando poco a poco.
Madrid 2020, un mes después del comienzo del encierro, 5 tipos encerrados en diferentes lugares de la capital juegan con samples, comparten ideas a través de Skype, mezclan guitarras afiladas, sintetizadores y voces de fiesta. Experimentan hasta la saciedad y construyen canciones desde cero y en la distancia.
Una nueva forma de trabajar con un solo pensamiento en mente: la idea de escapar como Houdini, corriendo sin plan después de 10 años. Estos son los caminos que nos llevan a su EP más reciente «Les Malditos».
Como bien avanzábamos, «Canadá (Cap. 1: Encuentro)» se trata del primer tema de una historia que iremos conociendo poco a poco.
Tras un descanso obligado por la situación actual, la banda madrileña ha decidido seguir adelante y apostar por una nueva composición más íntima y cercana.
Así nace Canadá. El primer capítulo de una historia de 4 canciones donde, como en la vida misma, todo empieza, se desarrolla y antes de que las cosas se deterioren; explotan. Sin duda un ejercicio de honestidad musical que nos hará pensar.
En sus 15 años de vida, hemos visto bascular a The Noises por diferentes sonidos. Música indie de base a veces más rock y otras más pop aunque en esta ocasión, Fran y Jess, han querido dar el protagonismo a la melodía con una instrumentación libre de los excesos actuales de estudio. En definitiva, una nueva esencia propia del nuevo momento por el que está pasando la sociedad.
La voz sincera de las estrofas, los coros del estribillo, un wurlitzer elegante y minimal, una guitarra y una trompeta que juega con contra melodías a la voz, son los elementos más característicos de esta composición. Sin alardes innecesarios, pero creando unas texturas atrayentemente cálidas.
La nueva apuesta de The Noises proporciona un reto en el que cada canción representa una idea, una sensación.
En la segunda salida de The Noises, la agrupación nos soprende con «Diamantes (Cap.2: Impulso)». En este tema, tal y como repiten en el estribillo, los artistas querían plasmar cercanía y cotidianidad. Durante la composición anhelaron volver a sentirse libres, a dar abrazos y besos a sus familiares y amigos, lo que ellos traducen en ver una película como Blade Runner o Desayuno con Diamentes un domingo en casa con sus más allegados, no porque no haya otra opción de plan sino porque realmente es lo que apetece hacer en ese instante.
La canción fue compuesta a piano en una tarde cualquiera y, durante mucho tiempo, la veían como una canción puramente acústica, desnuda y sin arreglos. Y así tenían pensado grabarla. Pero, cosas de la vida, otra tarde cualquiera y sintieron un “Impulso” y la empezaron a vestir y a arreglar con la ayuda de sus productores. Fue algo sumamente rápido y, sin apenas darse cuenta, tenían montada la canción en menos de dos horas. Fue algo normal, sencillo, como si estuviese ya escrito que tenía que suceder así.
A principios de nuevo año la banda promete un nuevo avance en la historia: «Enemigos (Cap.3: Caída)». Con este tema nos posicionamos al borde del final de la trama cantada de The Noises, donde, como en la vida misma, todo empieza, se desarrolla y antes de que se deteriore; explota. Este nuevo lanzamiento es un ejercicio de honestidad musical que nos hará pensar.
Se trata de una canción con sentido ambiental que facilita la imaginación, sobre todo en el estribillo de larga duración con variación en los acordes en los que se sustentan la armonía. La intención era meter un rollo 80’s como si el contexto fuera un baile de graduación americano, apoyados en unos synths, reverb y una percusión clásica de esa época. La banda imaginaba que la ruptura de la que hablan debía ser de película, por ello se retrotraen a su imaginario infantil y adolescente para rescatar la candidez tierna, nostálgica y evocativa de estos sentimientos tan duros provocados por una ruptura sentimental.
El último corte de la historia se desvela a finales del mes de abril y lleva por título «Nubes de Metal (Cap.4: Resurgir)». El tema es una lucha quijotesca donde finalmente los molinos se transforman en nuestros peores demonios. Es un ejercicio de honestidad en el cual la realidad golpea en primera persona, la banda se ha visto obligada a desnudarse emocionalmente para seguir avanzando y esto les ha servido como una terapia perfecta para entender sus mayores miedos.
«Hay veces que en las letras te tienes que poner delante del espejo, y mirarte frente a frente, sin artificios, sin maquillaje y sin ropa. Ver la realidad de lo que eres, de lo que has vivido y de lo que quieres contar. Es sin duda nuestra cancion mas intima y personal.»